Regálame un instante de cielo, aunque el resto de mi vida sea un infierno

No quiero vivir de caricias, no quiero falsos besos
busco a la soledad en que me dejaste, que me tiene preso;
dame un instante del cielo, así todo sea falso
así sea siempre mi vida, así siga siendo de humanos,
regálame ese instante del cielo, para hacer lo correcto
para poder vivir, solo por no caer en malas manos.... FernandoStark.!


Regalame un instante de cielo en tus brazos
momento sublime e inolvidable a tu lado,
aunque viva sin ti y la soledad me atrape
me lleve al infierno de dolor indomable
dame un sí en instante, un corto beso de amante
dame el torrente de vida que aflora en tus labios
para soportar el fuego de no tenerte a mi lado
dame un segundo en tu corazón para amarte...............      Kaizer


Regálame un instante de cielo,
aunque el resto de mi vida sea un infierno
y vivir junto a tu lado situaciones que nunca he pensado,
aventuras imborrables y momentos muy audaces;
disfrutar de felicidad en tus alas confortantes,
solo tu eres mi ángel y yo el siniestro de mi desvelos....
quiero volar contigo y no desfallecer en el intento
te alcanzaré paso a paso aunque me tome mil años
y no pensare en retroceder....
mis dias son años si tu no estas a mi lado....
reclamando al destino el porque no me tienes en tu regazo...
queriendo olvidar mi averno
y estar contigo en nuestro empíreo reluciendo.............. Orozckar..

Leccion de amor...

El letargo de mi corazón finiquitó cuando entraste a mi vida,
la sonrisa de mi cara se dibujo cual lápiz en un papel,
sin cesar mis ganas de amar, ellas sabían que tu ibas a llegar,
no espere que llegue el momento, mi destino lo firmo así,
que yo te llegue a conocer y esto nunca llegara a su fin
mi nombre y el tuyo se firmaron en marfil
imborrable en mi mente así será para siempre
Darme por vencido fue una opinión,
ya que creí ineluctable poder tener tu corazón, 
todo el mundo se equivoca, no pude ser la excepción,
tu entraste en mi vida y mi alma cedió sin condición

Entelequia Nocturna

Destellan sus paseos nocturnos en tus pupilas de ocaso;

en el vaivén de las olas, oyes su voz arrulladora...Te llama

tan real que te cubre la duda con su alegre curiosidad;

en el instante que el mundo gira en su entorno;

la quieta habitación se enciende,

cuando es ella quién te despierta de ese helado sueño.

Más tranquilo aspiras el aire que tiene su aroma;

y bajo su arrullo, como infante de cuna vuelves a soñar;

sin dejarla de amar... Ana María